Asia y América Latina comparten una historia de luchas en defensa de la democracia contra amenazas internas y externas. Amenazas que hoy todavía perduran y nos impulsan a reunirnos y compartir historias, experiencias del trauma, estrategias de resistencia y múltiples formas de memoria. Como muchos países vecinos, Argentina vivió su último régimen dictatorial durante las décadas de 1970 y 1980. El llamado Proceso de Reorganización Nacional comenzó el 24 de marzo de 1976 con un golpe militar que depuso al gobierno democrático peronista, implementó la ley marcial y desplegó el más violento plan sistemático de terrorismo de Estado que ha vivido nuestro país, dejando un vacío de 30.000 ciudadanxs desaparecidxs. Respaldada por la doctrina de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, la dictadura duró más de siete años, hasta el retorno de la democracia en 1983. Algo similar ocurrió en Corea, que estuvo gobernada por dictaduras militares desde 1961 hasta 1987, cuando el presidente de facto Chun Doo-hwan fue derrocado por el movimiento de democratización. Tanto a Chun como a su predecesor Park Chung Hee se les atribuye la modernización de Corea del Sur, pero con un enorme costo político y social. Este periodo se caracterizó tanto por la severa represión política como por los rápidos cambios sociales y económicos.
En MaytoDay, Gwangju Biennale Foundation, Gwangju, Corea del Sur, 2020.